27.9.10

La culpa - (refrito de 2007)

Hay quienes dicen que no pueden escapar de ella y otros que viven sin ella.
Obviamente no hablamos de una mujer (¿¿quien podría vivir sin nosotras?? jajaja).

El tema de hoy como bien está titulado, es La Culpa.

Un poco surgió a raíz de un post que publiqué en mi otro blog (perfumes del alma). Si bien en ese post el tema central no es la culpa, me di cuenta que ella está presente en muchas de las respuestas e incluso en muchas de las excusas que ponemos ante determinadas situaciones.

Hay una canción de Andrés Calamaro (Las Oportunidades) que decía "La culpa es un invento muy poco generoso"... y yo creo que es verdad. Sobre todo en eso de que la culpa es un invento de alguien que se sentía culposo por tener él solo esa sensación y quiso compartirla!!!.

Para hablar de la culpa podemos hacerlo desde el punto de vista espiritual, desde el punto de vista humorístico, o desde el punto de vista femenino (este último me parece que va a pasar por el otro blog).

Dentro de lo humorístico está la clásica y conocidísima "idishe mame".
Esto no corre solo para madres judías o familias judías sino que se lo conoce hoy en día como una especie de síndrome¿? de ciertas madres (aunque conozco mujeres que no son madres y entran perfectamente en esta descripción).

Se traduce así a una mujer exagerada y obsesionada que si, por ejemplo, el hijo se va de campamento, entonces la mamá le manda cinco pullóveres "por si acaso" (uno se puede ensuciar, uno se puede perder, uno se lo puede haber prestado a un amigo, y uno... por si acaso que haya mucho frío y tenga que vestirse dos). ¿Donde está la culpa?. Pues el hijo ya se va criando con la culpa de lo que puede llegar a pasar si no lleva 5 pullóveres!.

También existen chistes sobre este tipo de mujeres:

Hola! menos mal que estás vivo, hijo mío!. Como no me llamabas, fui a ver a los hospitales, comisarías, bomberos y ambulancias, pero bueno, por suerte vos estabas lo más bien, diviertiéndote por ahí.

Moraleja: Si te divertís debés sentirte culpable!....


Ni hablemos de la culpa que nos da comernos una buena y generosa porción de torta de chocolate con crema, justito cuando está empezando el veranito y nuestro cuerpo muestra kilos de más. (ok, esto último nos afecta más a las mujeres ¿no?, entonces lo anotaré para el posteo en perfumes del alma jeje).

La culpa por sacarle un poco de gaseosa a nuestro hermano cuando estaba distraído, por hacer travesuras en la escuela y "mandar al frente" a un compañero que nada tuvo que ver en el hecho, por cortarle el pelo a tu mejor amiga (y mal a propósito). Por romper un jarrón mientras corríamos como desaforados en casa mientras nuestra madre gritaba: "CUIDADO QUE VAS A ROMPER ALGOOO!!".

También están las culpas que se generan por leyendas urbanas y que funcionan en todas las edades:
¿quien no se tragó un chicle y después pensó que se le iba a quedar pegoteado todo adentro?. Ni hablar de si te trababas una semilla!!!...
¿quien no tuvo miedo en sus primeras mentiras de niño esperando que crezca la nariz?
¿o que si no estudiabas algo de burro ibas a tener? (no vale ser mal pensado, estoy hablando de las orejas).
¿quien no estuvo atento a la conocidísima leyenda urbana de que te sacaban los riñones?. (OJO con las mujeres que conocés y te vas enseguida con ella!!!!).

Hay muchos estadios de culpa. La culpa auténtica, la culpa inocente, la culpa falsa, la culpa de la linda, de la fea, del musculoso, del flacucho. Estan las culpas que se transforman en leyendas urbanas (o al revés), están las culpas de chicos, de grandes, de casados, de solteros, de niños en edad escolar, de jóvenes en edad universitaria. Culpas de padres, culpas de abuelos...(bah, creo que estos últimos ya no tienen culpas).

En fin, es un tema que da para largo pero que debemos saber y tener en cuenta que es algo a lo que nos acostumbraron desde que nacimos. Sentirse culpable es una respuesta aprendida.

Entonces, como ya hablamos de aprendizaje anteriormente, y dado que sentirse culpable es algo más que aprendimos...¿Qué anécdotas recordás de las cuales resultaste culpable con razón de causa, culpable sin razón aparente, culpable muchos años después (o minutos después)?. O simplemente situaciones en donde consideres que la culpa juega a favor, y situaciones en las que la culpa juega en contra para un mejor desarrollo?.

Los dejo entonces con la mejor imagen que, para mí, representa la culpa. "El Gato con Botas" de la peli de Shrek 1. (Shrek culpable por dejar al gatito, Burro culpable por no quererlo, Gatito culpable por querer engañar a Shrek, y por decantación de la situación, Padre de Fiona culpable por contratar al gatito, Fiona culpable por discutir con Shrek, Madre de Fiona culpable por no estar atenta a los "negociados" de su esposo; demás personajes del cuento, culpables por usufructo ilegal de la propiedad del ogro).

Saludos y buen inicio de semana!!!! (y a no sentirse culpables porque vida hay una sola y hay que vivirla!).

14.9.10

Los perfumes



El otro día, leyendo en un blog del Diario Clarín sobre los perfumes, allí el autor decía que desconfiaba sobre aquellas cosas que carecían de perfume y entonces planteó la duda. El CiberEspacio tiene aroma? Deberíamos desconfiar de algo que no lo tiene?.

Aquí una breve reflexión al respecto:


El perfume es algo así como un transporte imaginario que puede llevarnos a viajar en el tiempo.
Nos lleva a lugares que sólo el disparador de un perfume puede hacerlo.
Puede transportarnos a vivir fantasías, recuerdos, anhelos.

El perfume nos pasea, nos embriaga, nos estimula. Nos despierta sensaciones que movilizan nuestra mente. Y ahí creo que tiene un punto en común con el "ciberespacio".

En el ciberespacio las palabras son el perfume.
Algunas seducen, embriagan y cautivan. Otras en cambio empalagan, son ácidas, o simplemente nos producen rechazo.

Así como hay perfumes que no nos gustan o nos remiten a situaciones negativas o dolorosas, como el perfume de ciertas flores que recuerdan a un velorio o nos remiten a la muerte misma.
Así puede pasarnos en la web, hay "perfumes" más agradables que otros.

Yo no desconfío de todo aquello que está ausente del perfume, sólo me doy permiso para desconfiar de aquellas personas que mantienen ausentes sus sentidos.

9.9.10

Los piropos

Como todas las mañanas salí de casa para llevar a mi hija al jardín de infantes que, por suerte, queda a la vuelta y por ese motivo vamos caminando.
En ese horario abundan por la zona, obreros de la construcción, operarios, chicos de facultad (tengo una sede cerca), paseadores de perros, jardineros y algún que otro caminante que anda perdido por el barrio y bajo este panorama salgo todas las mañanas totalmente despreocupada, en jeans, botas, una campera cuando hace frío o algún atuendo similar. Nada llamativo ni tampoco maquillada cual Cristina Kirchner.

A la ida, cuando voy acompañada por mi hija, todo transcurre en un ambiente de sabia armonía, respeto, tranquilidad y por sobre todas las cosas silencio. (porque por alguna extraña razón los hombres se cuidan de decir algo cuando estás acompañada de tu pequeña hija). El tema en cuestión se da cuando debo volver sobre mis pasos.

- Adiós belleza!!!
- Pero que pedazo de hembra!!!

Son algunas de las cosas que me han tocado escuchar en las tantas veces que pasé por ahí.

A partir de esta experiencia, me puse a pensar que para bien o para mal las mujeres convivimos cotidianamente con los piropos. Esos mismos con los que por alguna extraña razón tenemos una relación amor- odio. ¿por qué será?¿será por quienes lo dicen?¿será por lo que dicen?¿será por el momento en el que nos toma de sorpresa?.

Según la Wikipedia, la definición de "piropo" es la siguiente:

"del latín pyrōpus que a su vez deriva del griego πυρωπός es una piedra fina de color rojo de fuego, variedad de granate. . También se le llama así al rubí. Del significado literal de la palabra deriva su sentido coloquial como lisonja, requiebro o frase ingeniosa que se lanza a una persona (tradicionalmente a una mujer) para adularla con el propósito de cortejarla o enamorarla. Los piropos suelen resaltar la belleza de la mujer o del hombre. A veces pueden resultar ofensivos y materializar la dominación simbólica masculina, incluso el acoso sexual. Los piropos pueden llegar a ser tan ingeniosos, pícaros y originales que son un género literario popular, similar por su brevedad a los epigramas, los aforismos, las greguerías y los haikus."

Y luego cita algunos ejemplos como:
"Qué distraídos están en el cielo que los ángeles se escapan."

"Chaparrita cuerpo de uva, ya llegó tu vino blanco."

"Flaca, tírame un hueso."

"¡Cuántas curvas y yo sin frenos!"

"¿Qué hace una estrella volando tan bajito?"

"Quién fuera bizco para verte dos veces."

"Bendita sea la madre que parió a los obreros que aplanaron el pavimento por el que pasas ¡Monumento!". (este último creo que es muy largo y para cuando dice "monumento" una ya cruzó la 9 de julio).

"Si eres casada ¡No soy celoso!"

"Si así está el caminito ¡Cómo estará el pueblito!"

"Quisiera ser chocolate para derretirme en tu boca"

"Con una mamá así para que juguetes"

Si bien estamos acostumbradas a ver, oír y por lo tanto suponer que el piropo es terreno exclusivo de los hombres, extrañamente en ningún lado indica que esto deba ser así. De hecho el diccionario indica que es "algo que se le dice a una persona" y por lo tanto debería existir en el listado precedente algún ejemplo "del otro lado", es decir ¿qué no hay piropos de mujeres a hombres?¿tanto machismo puede incluso obnubilar una definción?.

Es entendible que cause rechazo escuchar de boquitas pintadas e inocentes frases tales como :

“Al pan pan, al vino vino y a mi coño tu pepino”

Y si quieren leer y ver más de estos, les recomiendo pasar por el sitio Laura Spivak (a quien pertenece el piropo anteriormente citado).
Laura es marplatense, artista plástica y suele jugar con el pudor y la imaginación. En el 2005 hizo una muestra en el Centro Cultural de España en Buenos Aires cuyo título era:

"dijo la doncella con su habitual timidez" (si hacen click en el link van directo a la muestra)

Para dicha muestra investigó sobre los piropos y los contó del lado del revés. Lo más original fue la forma de contarlo. Bordó esos textos con hilos de colores en trozos del más fino algodón y en prolijas carpetas. Les cosió pájaros, flores, penes y todo aquello que contribuyera a expresarlos. Los enmarcó en portarretratos y cuadritos primorosos, pintados en tonos pastel. Luego los acomodó sobre una estantería del Centro Cultural de España, donde los ambientó con lámparas de luces suaves y cajitas delicadas que trajo de su casa.(*)

De todos modos, al margen de amor y odios que generan por igual, todas sabemos que hay cuatro categorías que se destacan:

- el piropo sencillito y respetuoso.
Adiós hermosa!!

- el piropo inocentón, con versito, rima y de manual.
Si la belleza matara, vos no tendrías perdón de Dios.

- el piropo subidito de tono pero con respeto.
Si así está la cola cómo va a estar la función!

- el piropo guarro (que pocas veces rima como el del ejemplo).
Corazón de arroz, la que me cuelga es para vos


Finalmente, más allá de competencias entre masculino y femenino, lo cierto es que un buen piropo en el momento justo nos despierta una sonrisa, nos levanta la autoestima y nada mejor que eso para comenzar la jornada y cambiar un día de miércoles a un: "puede ser un gran día".

Por eso y para ir cerrando les dejo aquí un videíto estupendo, imperdible!!!. La humorista que lo cuenta vive en España, pero igual parece que los rubros por excelencia para los piropos no hacen distinción de fronteras.




Que tengan un excelente día!!!

Sophie


(editado originalmente en el blog PUNTO G)


(*) dijo María Eugenia Ludueña

Este mes...

En las épocas pasadas las cosas eran distintas. Un beso se guardaba.... Los libros que he leído

Fijate de que se trata en PERFUME DE MUJER. Mi otro blog.

Dejate embriagar.

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